Un experimento creativo para trones by Martínez de Tabarca
El torreón del Rey
Un buen día, mientras Andrés le contaba una historia de piratas, la cual discuría en Oropesa del Mar, Hugo quedaba perplejo de lo que escuchaba del temible pirata Barbarroja y de los berberiscos que le seguían.
Estas historias discurrían en el precioso pueblo de Oropesa del Mar en la provincia de Castellón, donde se encuentra «el torreón del Rey» , que desde ahí se podían defender los españoles de piratas, corsarios y demás escoria, algunos con patente de corso incluida.
Hasta el año 1568 Oropesa carecía de fortaleza para poder disuadir a los enemigos del mar de las escaramuzas, por lo que esta localidad era saqueada con facilidad. El hecho concreto que llevó la petición hasta los ojos del Rey Felipe II fue el ataque pirata a Torreblanca acontecido en el año 1397. Viendo el desastre causado por aquella acción en una localidad tan próxima a Oropesa los ciudadanos de la villa decidieron movilizarse para conseguir un aumento de su propia seguridad.
Oropesa fue lugar de frecuentes ataques berberiscos a lo largo de un prolongado periodo hasta el siglo XVIII, y durante las Germanías, el ejército de Estellés fue derrotado aquí por el duque de Segorbe.
El Torreón del Rey constituye un excepcional ejemplo de la arquitectura militar de la época renacentista. Es de planta cuadrangular, esta construida sobre las ruinas de otra torre y posee dos garitas opuestas en la planta alta y dos casamatas en la baja, cubriendo todo el horizonte.
Las caponeras en esquinas opuestas de la planta baja también es consecuencia de la obra de la nueva torre. Estas curiosas garitas de vigilancia contaban con tres troneras cada una desde las que se tenía una buena visibilidad de los alrededores. Las caponeras cuentan con un radio exterior de 5 metros y un radio interior de 2′7 metros, lo que nos da una anchura de muros de 230 cm y contando con una pequeña abertura en su parte superior a modo de ventilación.
Una vez en funcionamiento, «el torreón del Rey», los bandoleros del mar, tuvieron que buscarse otro sitio para saquear, violar, matar, etc.
Poco tiempo les quedaba a los turcos, berberiscos y demás calaña, para molestar a un español, puesto que el 7 de octubre de 1571 ESPAÑA, les arrasaría en la famosa Batalla de LEPANTO.
Hugo, tras la clase de Historia de España, y arquitectura, le pidió a su amigo Andrés visitar, esta localidad, y por su puesto Andrés accedió, sin más dilación, soltaron amaras con rumbo al Cabo de Oropesa, en la llamada Punta de les Llances, junto al faro de la misma localidad.
Autor: Hugo Martínez Alonso