La Fragata Blas de Lezo recibe la bandera de combate
El pasado 29 de junio de 2015 tuvo lugar en el muelle del puerto de Getxo (Bilbao) la entrega de la bandera de combate a la Fragata F-103 “Blas de Lezo”. En el acto estuvieron presente entre otros, el ministro de Defensa, Pedro Morenés, SAR Doña Ana de Orleans, duquesa de Calabria que ejerció de madrina en el acto todo un orgullo para ella, según contó en su discurso.
La Fragata Blas de Lezo, se entrego a la Armada el 16 de diciembre de 2004, es el quinto buque en la Historia de la Armada que lleva el nombre del teniente general Blas de Lezo y Olavarrieta, héroe de la batalla de Cartagena de Indias, y uno de los más ilustres marinos de nuestra historia.
Los valores que simboliza la Fragata Blas de Lezo, no podían ser otros que los mostrados por el propio teniente general Blas de Lezo y Olavarrieta durante toda su vida, defendiendo su bandera: integridad, constancia, lealtad, honor, valor y disciplina.
Se denomina bandera de combate, al pabellón nacional que arbolan los navíos de guerra justo antes de entrar en combate. Las dimensiones de esta son especialmente grandes y sólo se larga a popa en las acciones bélicas y en grandes solemnidades.
La característica principal de la bandera de combate es su gran tamaño. Sus grandes dimensiones (más de 6 m de ancho) es debido a que en los siglos XVII y XVIII era difícil la identificación de los pabellones por el espeso humo generado por los cañones en la batalla.
La bandera de combate eleva mucho la moral del personal de abordo. Cuando el barco se rinde, la bandera es arriada y el enemigo suele tomarla como trofeo.
A pesar de que el acto de la entrega de la bandera de combate fue todo un éxito, por la afluencia de gente, desgraciadamente, también habían cuatro desalmados gritando improperios. Estos portaban banderas ilegales (anticonstitucionales) y ni ellos sabían quien fue nuestro héroe, Don Blas de Lezo y Olavarrieta, no se, si no lo sabían por ser víctimas de la L.O.G.S.E. o si por el contrario es la educación que reciben en su casa, la cual quedó como “Cagancho en Almagro”. Por su puesto, esto no fue más que una pequeña anécdota, que no le hizo sombra al acto tan importante al que estábamos citados todos los españoles de bien.
La duquesa de Calabria durante su discurso recordó que la bandera que ha entregado a la fragata “representa a todos los españoles” y es “la seña de identidad de una gran nación”.
Por último, quiero recordar, a todos los marinos que han salido de las tierras vascas, que han defendido a su patria hasta la muerte, sin tener miedo de que cada día se enfrentaban a ella.
Autor: Hugo Martínez